Esta acción, de naturaleza radiofónica, invitó a los participantes a realizar un itinerario por diferentes espacios de la ciudad junto a Esther Ferrer, el 23 de noviembre de 2017.  En el recorrido, de aproximadamente dos horas, el grupo repite incansablemente: TA, TE, TI, TO, TU, TA, TE, TI, TO, TU, TA, TE, TI, TO, TU…, al tiempo que los sonidos propios de lo urbano interfieren en esa especie de salmodia interminable.

Un grupo de gente se desplaza por diferentes lugares repitiendo incansablemente: TATETITOTU, TATETITOTU… como una salmodia interminable y monótona.

Mientras tanto…

los niños juegan, los creyentes rezan, los soldados desfilan, los corredores de bolsa especulan, los obreros trabajan, los gallos se pelean, los metros se suceden, la sirena da la alarma, los manifestantes se manifiestan, los trenes llegan, los ordenadores ordenan, el mercado se agita, el agua corre, los coches pasan y la radio suena y

alguien habla por teléfono y…

alguien duerme, eructa, caga, mea, llora, respira, suspira, bosteza, mastica, se suena, tose, jadea, vomita, estornuda, se masturba, se ríe

y..

el cordero bala, el caballo relincha, el perro ladra, el gato maúlla, el burro rebuzna, las gallinas cacarean, el toro brama, el mosquito zumba, los pájaros cantan, la rana croa, el buey muge, el lobo aúlla y el gallo canta.

Una pieza de insatisfacción rigurosamente absurda, como la vida de todos los días en 1994. Como en la Edad Media…

supongo.

Esther Ferrer

 

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Fecha:
09/04/2018
Realización:
Esther Ferrer. Grabación y masterización para esta cápsula de Juan Carlos Blancas
Licencia:
Creative Commons by-nc-sa 4.0