¿Qué es el espacio público? ¿Qué capacidad tiene la escultura de transformarlo realmente? ¿Qué relación tiene la escala humana con la arquitectura que se diseña?

Como un chiste del Modulor de Le Corbusier, algunas de las obras de Thomas Schütte presentadas en Retrospección quieren pensar los problemas del diseño y la arquitectura en los inicios de la posmodernidad europea.

En esta cápsula dedicada a la exposición que tuvo lugar en el Museo Reina Sofía entre febrero y mayo de 2010, se puede oír el ruido constante del tráfico en la Plaza Nouvel y de un edificio cuyo arquitecto nada o muy poco aprendió de estos discursos a la hora de planificarlo. Junto a este ruido, puede escucharse la charla con Thomas Schütte, en la que se pone de manifiesto la obsolescencia de su lucha contra las instituciones, lugares a los que ha dejado de enfrentarse, puesto que según él tras los debates de los 70 se han conseguido los objetivos que buscaban, como por ejemplo la apertura a los lenguajes artísticos en los que artistas como él o Daniel Buren trabajaban. Ahora que las instituciones los han asumido y reconocido, Schütte explica que ya no las necesitan más que para hacer retrospectivas, el motivo paradójico por el que sostiene esta entrevista.

El espacio público, concluye Schütte, es ahora Internet, donde alguien de su generación nunca habría podido trabajar en los 70. El espacio público, pese a todas las reformulaciones, debería ser el sentido común, concluye.

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Fecha:
21/01/2011
Realización:
José Luis Espejo
Licencia:
Creative Commons by-nc-sa 4.0